La semana que viene estaré en Kronberg en el Braun Prize, un concurso internacional de diseño evidentemente organizado por la famosa empresa alemana Braun, que intenta promocionar diseñadores industriales principiantes de todo el mundo. Este año se han recibido casi mil envíos.
Iré en representación de la Escuela Elisava como jurado. Y la cosa va por partida doble, porque también voy como acompañante de Bruno Peral, un ex-alumno que está entre los cuatro finalistas.
Bruno ha diseñado un recipiente de cerámica consistente en cuatro elementos, inspirados por artefactos culinarios de diferentes culturas. El proyecto se denomina «Mengin». Estos cuatro elementos son módulares, la fuente de calor es una vitrocerámica y se pueden cocinar una variada gama de platos que va del cous-cous a los huevos fritos.
Aprovecharé la visita e iré a ver la emblemática colección Braun, me han dicho desde la organización que habrá una Special Sale de productos antiguos y todo.
4/09/2007 a las 22:18 |
¡Vaya qué bien!. Ya nos cuenta cómo de reñido estaba el premio, y de la colección permanente de la Braun. Suerte al finalista! :)
4/09/2007 a las 23:18 |
[…] lo contó hace un tiempecito, pero no quería adelantar nada hasta que él no lo hiciera público: Ariel Guersenzvaig es jurado del prestigiosísimo Premio Braun de este año, algo por lo que […]
14/09/2007 a las 16:53 |
[…] Estoy de vuelta de Kronberg/Frankfurt donde fuí a acompañar a Bruno, un ex-alumno de Elisava, nominado al Premio Braun. Bruno finalmente quedó segundo en cantidad de votos (resultado no-oficial, ya que solo se […]